El caso Montecarlo coge impulso. A comienzos de octubre se producirá una batería declaraciones en el Juzgado de instrucción número 4 de Arrecife, al frente del cual se encuentra ahora el juez Ricardo Fiestras. Entre los citados se encuentra el actual alcalde de Arrecife, José Montelongo.

Montelongo señala que “es verdad que han llegado nuevas citaciones al Ayuntamiento”. “Eso para mí es una buena noticia porque quiere decir que por fin el caso va caminando, muy lento pero va caminando, que es en definitiva lo que quiero”, afirma el primer edil, que pidió el archivo de su imputación a mediados del año pasado, dos años después de ser citado por primera vez. “Espero tener respuesta en breve y que se culmine lo antes posible”, añade.

El Juzgado decidió archivar, a petición de la Fiscalía, una de las cinco piezas en las que se dividió el caso Montecarlo, relacionada con la empresa Gesineal, del abogado Federico Toledo y el economista Javier Betancort.

El Juzgado ha cursado citaciones en las piezas en las que se investigan pagos sin los trámites reglamentarios a la empresa Tunera y facturas de Inelcon, empresa a la que se le reconocieron al margen del presupuesto cerca de 70 facturas que sumaban más de 700.000 euros. El Juzgado investiga si se dio un presunto fraccionamiento de contratos y el “inflado” de precios.

“Nunca me he negado a declarar, incluso cuando el secreto de sumario estaba vigente pedí que se me adelantara la declaración porque quería que se resolviera lo antes posible mi situación”, subraya Montelongo, que era concejal de Hacienda en la época de los hechos investigados. Asegura que volverá a "colaborar" para despejar "las dudas que se tengan".

“Nunca me he negado a declarar, incluso cuando el secreto de sumario estaba vigente pedí que se me adelantara la declaración”

Montelongo resalta que para que el Ayuntamiento de Arrecife pudiera acogerse a los créditos del plan de pago a proveedores se produjo un “reconocimiento extrajudicial” de “diferentes facturas” que pasaron por el pleno municipal, “un paso previo” para proceder a su abono. Otras facturas “ya estaban” en el departamento de Tesorería del Consistorio.

El actual alcalde recalca que el reconocimiento de las facturas se hizo “sin informes negativos de ningún tipo”. “Las facturas habían pasado todos los trámites pertinentes, con los técnicos, los concejales de área, Intervención, Tesorería… ir en contra de un expediente que estaba impoluto también podría tener otras consecuencias”, afirma Montelongo, quien entiende que el expediente de reconocimiento de facturas “tenía todos los parabienes”.