Fefa Toledo (Lanzarote), Jaqueline Sánchez (Perú), Milena Pochwatka (Polonia), Lucy Djassi (Portugal) y Elvis A. Báez son Punctum, un colectivo de fotógrafos que ha decidido salir a la calle para capturar la vida y los pensamientos de quien se cruce en su camino.

Han querido hacer la versión conejera de ‘Humans of New York’, un proyecto del fotógrafo americano Brandon Stanton que ha enganchado a 20 millones de usuarios en las redes sociales contando historias de gente anónima. Pequeños best sellers diarios, de personas que se sientan en el parque o se dirigen a su trabajo.

“Inmigrantes, gente de aquí, gente que viene y gente que va”, resume Lucy. “Les decimos que cuenten lo que quieran contar”. Corto o largo. Bueno o malo. Da igual. Le hacen un retrato, graban su historia y la transcriben en su cuenta de Instagram.

Van regalando tiempo y un papel en blanco para que la gente deje su huella. Un documento supranacional de identidad. Una historia, un recuerdo, un pensamiento. Y la gente se suelta: habla y mira al objetivo. Así lo hace Eunesi: “De retratos autobiográficos de una isla donde vengo, Cali, calienta mucho y hay más bulla. No hay peligro acá, allá roban mucho. A pesar de ello echo de menos mi tierra y extraño, sobre todo, a mi familia. ¡Deseo ver tanto a mis nietas y bisnietas! Tengo 85 años y no hago sino pasear, ir a la playa, visitar a mis hijos y leer. Leo mucho porque me encanta”, dice.

“Recuerdo que una vez hicimos un concurso en el que teníamos que dibujar una tarta. A un primo mío le quedó más bonita que la mía. Me enfadé. A partir de ese momento empecé a observar cómo se desenvolvía ilustrando. Fue entonces cuando descubrí lo que más me gustaba”, dice Ana Isabel, estudiante de Bachillerato artístico.

También salen Ana, Paolo, Pepín… Gente de edades, orígenes y situaciones muy diferentes, con al menos una cosa en común: una isla, Lanzarote.

José. Autora: Milena Pochwatka.

“Pa’l Pancho”

Expusieron por primera vez su obra en la Sala Benito Pérez Armas (Esa belleza), participaron en la Bienal Off con Sustancia y ya han hecho una colectiva en la sala de exposiciones de la T2. Se reúnen una vez a la semana y practican la fotografía con pasión. “Es muy enriquecedor que tengamos orígenes distintos”, subraya Fefa.

Se conocieron en la escuela de arte Pancho Lasso estudiando el grado de Fotografía. Fefa estaba recién jubilada. “Siempre me había gustado la fotografía y he sido una persona activa, así que dije ‘¡pa´l Pancho!”, cuenta. “Me lo tuve que currar, sobre todo el primer año… con los medios informáticos”.

“Desde que te enseñan a fotografiar en modo manual puedes contar algo en tus propios términos. Tú lo controlas todo: el encuadre, la luz… Qué y cómo quieres contar algo”

Lucy, licenciada en Comunicación y Relaciones Públicas, estaba viviendo la vida surfera en Caleta de Famara cuando tuvo una caída que le dejó sin coger olas durante una temporada. Se matriculó “por hacer algo” y descubrió que la fotografía era mucho más que una afición.

A Milena, ex azafata de vuelo y aficionada a la fotografía, la escuela de arte le llegó por el boca a boca. Todo empezó con un “¿por qué no te apuntas?” y terminó con ella haciendo el examen de acceso.

Jaqueline se acababa de quedar en paro. “Mi marido me animó. ‘Te va a gustar’, me decía. ‘Te va a relajar”. Y acertó. “Empecé de cero y el primer año me costó un montón”, pero ahora la fotografía es una manifestación artística de la que no puede prescindir en su vida diaria.

“Desde que te enseñan a fotografiar en modo manual puedes contar algo en tus propios términos. Tú lo controlas todo: el encuadre, la luz… Qué y cómo quieres contar algo”, explica Lucy.

El ‘punctum’, es un concepto fotográfico acuñado por el escritor Roland Barthes en 1980, en el libro 'La cámara lúcida'. “Es ese algo que te atrae de una foto, lo que primero te impacta”.

Ana Isabel. Autora: Jaqueline Sánchez.

Talleres infantiles

“Hay que empezar desde pequeño a educar en cultura”, dicen en Punctum. Así lo hicieron ellas en su primera muestra, que completaron con unos talleres en los que participaron varios centros educativos. “Es importante que los niños se sientan parte del proyecto, estimularlos, que sea algo motivador” —dice Fefa, maestra jubilada— “Y hay que trabajar en los barrios”. Descentralizar la oferta.

¿Qué es la belleza para un chinijo? Y, sobre todo, “¿por qué, además de ir a parques de atracciones o zoológicos, no pueden ir a ver una exposición?”, se preguntan. “Ellos son el futuro; son los que van a aportar y a crear”, recuerda Milena. No hay motivo de mayor peso para estimular, motivar y hacer un buen trabajo previo con los consumidores de cultura más jóvenes.

El colectivo fotográfico Punctum tiene un año de vida y se mantiene en contacto con Ars Magna y Parto Cerebral. De momento, se reúnen en la Biblioteca Insular pero buscan un local propio donde poder echar raíces y organizar sus talleres: “Nos gustaría ayudar a dinamizar la vida cultural de la isla”.

Eunise. Autora: Fefa Toledo.